Cosecha: Comienza a mediados de abril, buscando buena calidad, concentración, aromas y madurez.
Despalillado y Molienda: Se utilizaran distintos regímenes de despalillado y molido de las bayas, además se utiliza un componente con racimo entero, para incrementar la complejidad y volumen.
Maceración: La uva se macera en frío a 6ºC por 10 días en tanques abiertos con capacidad para 8 y 6 toneladas antes de la fermentación.
Fermentación: Se lleva a cabo con levaduras nativas a distintas temperaturas. Se realizan diferentes técnicas de pisoneo y remontaje dependiendo del momento y condición del vino durante la fermentación.
Crianza: El vino es puesto en barricas de roble francés de tonelerías cuidadosamente seleccionadas durante un total de 16 meses. Una vez embotellado, el vino tiene una guarda en botella de por lo menos 6 meses antes de ser liberado para la venta.